
En estos años de acompañar a jóvenes en diversas experiencias dentro de grupos juveniles católicos he observado que existe el factor común de que el hablar de pastoral juvenil pareciera ser sinónimo de un gran desafío que pocas personas están dispuestas a aceptar.
Creo adecuado que mi primera publicación sea una invitación a reflexionar sobre la naturaleza de quienes son los jóvenes, para que los encargados de pastoral juvenil no nos desanimemos y por el contrario... nos sintamos reconfortados en que no somos los únicos que creemos en los jóvenes, y en este acompañamiento hacia ellos comprendamos que simplemente hemos de ser labradores que trabajen el terreno donde Dios ha sembrado su semilla, allí mismo, en los jóvenes que se nos ha encomendado.
Desafíos de la pastoral juvenil
0 comentarios:
Publicar un comentario